David Bisbal: "Entrevista
El artista David Bisbal.ANTONIO HEREDIAMUNDO |
David Bisbal: "No sé cuánto tiempo voy a poder defender mis canciones al 100%"
El almeriense acaba de publicar 'Me siento vivo', su octavo disco de estudio, y estrena documental por sus 20 años de carrera. "Para mí ha sido muy fuerte que el saludo de 'los máquinas' haya viralizado", dice
Con el sol abrasando en pleno mediodía de este veranillo de San Miguel, David Bisbal espera en vaqueros y chaqueta en una sala. A pocos metros está la piscina en azotea más grande de la capital con un puñado de bañistas remojándose en ella. Estamos en la última planta del Hotel Emperador de Madrid, un punto estratégico para que el almeriense llegue a tiempo a la entrevista tras un encuentro con fans en el centro.
Cuenta que está hasta arriba de trabajo. Se le ha juntado la promoción de su nuevo disco, Me siento vivo, con el lanzamiento de un documental por sus 20 años de carrera y la grabación de La Voz Kids. La pregunta es inevitable: ¿cómo se concilia todo teniendo niños pequeños?
"Rosanna y yo nos organizamos muy bien, somos un equipo. Obviamente mi trabajo me quita mucho tiempo pero, si no puedo llevarlos al cole, me planifico para recogerlos. Siempre estoy ahí", apunta.
Hay dos adjetivos que no he parado de escuchar y leer cada vez que salía su nombre: profesional y máquina. Una curiosidad sin más pero que define bien lo que es el personaje. Primero, porque hay que tener oficio y saber estar para mantenerse dos décadas en primera línea ganándose el respeto de la profesión. Después, porque hay que conocer las modas y reinventarse para seguir siendo un icono pop como lo es él.
El artista David Bisbal.ANTONIO HEREDIAMUNDO |
"Instagram, TikTok y todas estas plataformas siempre van a ayudar a dar a conocer tu trabajo. A mí me gusta adaptarme a todo y la verdad es que las disfruto", dice antes de entrar a hablar de la viralización del ¿Cómo están los máquinas?"Para mí ha sido muy fuerte. Es algo que yo he dicho toda la vida igual que hay gente que dice crack, monstruo o pisha. Todavía no me lo puedo creer. Pero gracias a lo que ha sucedido con el vídeo y a estar en La Voz, que lo ven los más pequeñitos, ha habido una conexión importante con el público joven", reconoce. "También he hecho programas de televisión que nunca antes me había planteado y con los que me he divertido mucho, como La Resistencia. Eso me ha conectado muy bien con la gente", añade.
En su nuevo álbum también busca esa unión con las nuevas generaciones. Ha trabajado con productores como Manuel Lara y Pablo Rouss -que están detrás de éxitos de Bad Bunny o Sebastián Yatra- o con Juan Pablo Villamil, uno de los integrantes de Morat. Sin embargo, lo hace sin volverse loco tratando de encajar en tendencias.
"Aprendo igual de los artistas que están empezando que de los más veteranos. Lo que tengo claro es que en los discos me gusta hacer estilos y géneros que marquen la diferencia con el trabajo anterior. Este tiene un sonido noventero, pero hay ritmos funk y también he querido recuperar esas grandes baladas que utilizan todo el rango vocal. Esas canciones son las más difíciles de cantar pero suponen todo un reto", asegura.
"Yo siempre defiendo hacer un disco. Es algo que no debe morir nunca", continúa. "El single market (mercado del single) ya sabemos lo que es. Presentas una canción que sabes que te va a funcionar en los conciertos o en las emisoras de radio, pero el resto de temas son sumamente importantes. Ahí te presentas a tu seguidor músico, el que es productor, el que escribe letras o es fanático de las técnicas vocales. Ellos se van a enfocar en eso que quizás no está en los singles", dice tajante.
Bisbal va por su octavo álbum de estudio y en 2022 recibió un cuádruple disco de diamante por las ventas de cuatro millones de copias a nivel mundial de toda su discografía. Aún así, reconoce que para él lo más importante sigue siendo el directo.
"Es verdad que en un disco dejas plasmada esa voz para toda la vida, pero para mí un concierto debe ser el objetivo número uno. La gente no quiere que le des el 50% ni el 70%, piden el 100%, y para eso hay mucha responsabilidad y mucha disciplina. No es solo cantar, también es prepararte deportivamente hablando o descansar lo suficiente", asegura.
En un momento de reflexión reconoce que las exigencias "internas y externas" cada vez son mayores. "No sé cuánto tiempo voy a poder permitirme el lujo de defender mis canciones al 100%. Va a ser un reto para mí porque mis temas son difíciles y yo quiero mantenerlos en su versión original. Además, cada vez tienes más proyectos, tienes que sorprender, salen artistas nuevos, tienes que reflejar un compromiso con tu equipo y la discográfica...".
Cuenta a modo de anécdota que un día su amigo David Villa le decía que para estar en el mismo nivel futbolístico tenía que estar cada vez más bajo de peso. "Fui a visitarlo a New York cuando estaba en la liga de EEUU y eso que te dice te da por pensar. Ahora mismo nosotros somos deportistas vocales, por así decirlo. Llegará un momento en que la preparación física será mucho más difícil. Yo soy consciente", añade.
Otro de sus buenos amigos, Alejandro Sanz, preocupaba a fans y no fans la pasada primavera al mostrarse vulnerable en Twitter con un mensaje en el que reconocía estar "triste y cansado" y llegaba incluso a escribir: "A veces no quiero ni estar. Literalmente".
"Obviamente es una profesión muy difícil y en la que tienes mucha presión. Pero, yo creo que ahí entra un poco la personalidad de cada artista", comienza respondiendo Bisbal a la pregunta sobre si ha tenido algún bache mental complicado como Sanz. "Yo no sirvo para estar solo y cuando me he sentido en un momento bajo no trato que las personas lo adivinen, sino que rápidamente pido un abrazo. Creo que es importante decir lo que a uno le sucede y pedir un abrazo es una cura fantástica", dice.
En estos días de actividad desenfrenada en el Congreso de los Diputados, Bisbal reconoce que sigue "cada sesión de control" aunque no acostumbra a opinar sobre ello. "A mí me gusta mucho la política de nuestro país. No sigo ningún medio en concreto porque me gusta sacar mis propias conclusiones y para eso veo mucho el canal de YouTube. Así puedo escuchar qué opinan los diferentes líderes", afirma.
Y, si fuera un partido y necesitase pactar, ¿qué pediría? "Que se respeten más entre ellos y no se mofen tanto los unos de los otros porque eso al final la gente lo ve. Hay muchas risas en el Congreso. Se están riendo continuamente y es una risa de broma, burlona. Evidentemente eso ha sido así a lo largo de la historia, pero se está intensificando cada vez más. Sería perfecto que dijeran lo mismo pero respetándose", añade.
Volviendo a las redes sociales, el almeriense desvela algunos datos. "El 75% de mis seguidores son mujeres aunque se está equiparando", dice. "Cada vez siento más a ese público masculino. Creo que nosotros [los hombres] somos tímidos a la hora de seguir, pero me escriben muchos chicos preguntándome por las técnicas vocales que utilizo o porque les gustan muchísimo ciertas canciones", apunta.
En un momento de su documental, que se estrena este octubre en Movistar+, Bisbal se encuentra con su equipo decidiendo el orden de canciones del concierto con el que repasará sus 20 años de carrera. Le apuntan que quizás el mejor tema para abrir es el primero de gran éxito, Corazón Latino, y él, nada convencido, explica que no le gusta cantarlo porque no siente que la letra vaya ya con él. Algo bastante lógico si se tiene en cuenta que era un chavalín recién salido de un programa de televisión.
"Me gusta mirar al pasado continuamente, pero tengo mi manera de hacerlo", dice. "Obviamente, soy lo que soy gracias a lo que he vivido, pero también me hubiese encantado cambiar algunas cosas. Si tuviera el poder de cambiar para mejorar, evidentemente lo haría", reconoce.
También queda hueco para hablar del futuro. "Tengo clarísimo que habrá gente a la que le guste y otros que no me soporten. Pero me conformo con saber que hago las cosas de la mejor manera posible. Sé que la perfección no existe, pero me gusta tratar bien a todo el mundo. Que la gente que se me acerque sienta empatía".
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